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miércoles, 6 de octubre de 2010

PREMIO NOBEL DE QUIMICA 2010



Oh! Carbono-Carbono
Por Virgilio López Azuán, Candidato a Ph.D.


La comunidad científica mundial recibió la noticia de la concesión del Premio Nobel de Química 2010 al investigador estadounidense Richard Heck y los japoneses Ei-ichi Negishi y Akira Suzuki, por sus trabajos sobre las reacciones de moléculas de carbono. Estos científicos trabajaron de manera separada y al juntar sus investigaciones se da un salto cualitativo para sintetizar moléculas nuevas que incidirán en los avances de la medicina, el sector industrial, la agricultura y llega hasta en el desarrollo complejo de la electrónica.
Ei-ichi Negishi (Changchun, 1935) trabaja en la Universidad Purdue, en West Lafayette (EEUU) y el japonés Akira Suzuki (1930),  retirado, investigador de la Universidad Hokkaidode Sapporo y Richard F. Heck (Springfield, EEUU, 1931), trabajó como investigador en la Universidad de Delaware (EEUU), en este momento también se encuentra en retiro. 
Parece sencillo decir, como lo hizo la Academia Sueca de Ciencias en Estocolmo, que esos expertos “fueron galardonados por el desarrollo de métodos nuevos y mas eficientes para unir entre si átomos de carbono para sintetizar las moléculas complejas que mejoran la vida diaria del hombre”.  Así literal suena fácil, pero ¿usted sabe lo que es unir entre si los átomos de carbono? “Los tres investigadores compartirán el galardón tras haber desarrollado por separado tres reacciones químicas distintas que emplean catalizadores de paladio para crear enlaces de carbono-carbono mediante emparejamientos cruzados”. Sólo los que tienen noción la actividad en el entorno de los átomos y las moléculas saben que debe ser un extraordinario aporte debido a las características del átomo de carbono. Debe provocarse un mecanismo de atracción para que esos átomos se acerquen siguiera. Estamos hablando de la química orgánica, o sea, la base de la vida, y fíjense que entre los tres científicos hay un japonés, lo que significa que Japón está tomando en serio estos asuntos en materia de creación de vida. Bueno, más allá de toda especulación, el ser humano se está aproximando a conocimientos claves de la vida misma, unos años atrás eso era un pensamiento mítico. Estos estudios aludidos, según los entendidos podrán en un futuro inmediato incidir en la fabricación de cremas para el sol(Reacción de Heck), mientras que la reacción de acoplamiento de Suzuki se utilizará para la fabricación de cristales líquidos para diodos de luz o pantallas luminosas. La Real Academia Sueca dice que: "Estas herramientas químicas han mejorado enormemente las posibilidades de los científicos para crear (compuestos) químicos sofisticados, por ejemplo moléculas basadas en el carbono tan complejas como las presentes en la naturaleza". Y esta última parte si interesa: “Las moléculas basadas en el carbono tan complejas como las presentes en la naturaleza”. Solo esta expresión nos revela la magnitud de estos estudios. En este momento seguro que equipos ligados a la bioética están elucubrando ideas para dar respuestas a estas investigaciones. Esto coincide con que también en este año 2010 se le otorgue el Premio Nobel de Medicina al padre de la fecundación 'in vitro', Robert Edwards, lo que también en su tiempo, incluso en la actualidad, ha levantado y está levantando protestas desde sectores de la iglesia católica por la implicación que tiene en la “creación” de seres humanos por vía no “natural”; mientras ya más de 4 millones de personas en todo el mundo han nacido mediante este método.
La ciencia sigue su avance y pronto tendremos televisores y computadores enrollables y todo esto será sencillo si la gran meta sería que a partir del carbono se cree vida de manera artificial, no con la artificialidad que plantea el método de la fecundación 'in vitro', de Robert Edwardsque en cierta forma los gametos humanos juegan su papel fundamental, sino aquella donde no participan los gametos. El tercer milenio nos trae grandes cosas aunque se mueran de hambre en todo el mundo, tres niños por segundo.

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