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domingo, 18 de septiembre de 2011


de Virgilio López Azuán, el Domingo, 18 de septiembre de 2011, 6:45
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La Maja desnuda

Autor: Virgilio López Azuán
Poesía del Efluvismo

Abres la quinta forma  es el cuerpo
cuerpo cómplice, levantado de los muros
sembrado de especies nocturnas.
Cuerpo de mundo, de manos blancas
de manos andadas con círculos moribundos.
Tomas las líneas, antojos de curvas brotadas
y veloces al instinto callado.
Brotas como ejército de hormigas que deliran,
casas del cuerpo oscuro y claro, en los dibujos del alma.
Vives con el beso y el murmullo de la imagen
que sube lleno de los animales de agua.
Que subes por las lianas de los ojos piratas
en preguntas selváticas dormidas en los pechos.
Vienes como eres, con tantos reflujos,
flor escrita en los labios, en el cielo que asoma.
Vienes como eres, asombro las pupilas
Y como siempre apuntas a los gusanos en la tierra,
Apuntas al limo prendido de humedades.
Eres el cuerpo, embrujo de puertas, abierto a tantas puertas,
dibujo en los telares, disuelto en las preguntas.
Hombre de curvas, mujer de líneas rectas.
Para tocarte se inventaron las tibiezas, las horas del día
rayado en veinticuatro agujas, pupilas de asombros,
con destino del mar y tierra, con el vientre herido
de las hambres trepadoras, con vientre de escaleras
Abres de nuevo, camino de vertientes blancas,
donde brotan los hijos, los dibujos del alma,
que en las equinas llaman mariposas 
que suben por los mundos izquierdos
Eres el cuerpo por aquellos trechos de hiedras verdes,
besos de sol y de brujos ensueños
Eres el cuerpo sin cara de endechas,
con las yerbas milenarias de la sangre,
y los tejidos revueltos y abrazados.
Saberte tibio, saberte herido,
saberte tendido pidiendo perdón a los relojes,
a los calendarios colgando Rosarios.
Eres el cuerpo, quédate con tu impronta de huesos,
con tu traje amarillo de incendios.
Eres el cuerpo, quédate sobre tardes imploradas,
sin el llanto al borde. Abres la quinta forma de en los caminos,
para exclamarte desde los dientes,
desde la boca abierta, indiscreta mujer entregada
a la última canción entonada por las olas.